¿Qué pasaría si te dijera que cerca del 90% del dinero en
circulación no existe? ¿Me creerías? ¿Me tacharías de conspiranoico? Antes de
que me juzgues, déjame explicarme:
De todo el dinero físico/tangible que hay en circulación alrededor
del globo solo existe un 10%, es decir, el restante (90%) son meros apuntes
contables.
Dicho de otra manera, solo un 10% del dinero mundial se
puede contar a través de billetes o, en su defecto, monedas. El resto es
dinero ficticio, derechos de cobro (activos) en un bloc de notas o en un
programa informático.
No, no me he vuelto loco, me baso en un instrumento que
utilizan los bancos llamado ‘’coeficiente de caja’’, con el cual, se les
permite (legalmente) solo mantener en forma de reservas líquidas el 2% del
dinero. El otro 98% (del dinero que ingresamos en el banco) lo utilizan para
invertir en negocios o bien para conceder nuevos créditos/préstamos. (Muchos os
estaréis preguntando entonces porque he puesto que es un 90% el dinero ficticio
y no un 98% siguiendo con la lógica del coeficiente de caja. Bien, es porque he
hecho una media ponderada, ya que el coeficiente de caja establecido depende de
la zona, región o continente.)
El banco crea dinero de la nada porque puede poner en
funcionamiento (en circulación) más dinero del que realmente tiene. Si alguien
va a un banco y deposita 10$, éste crea 90$ más sin contrapartida alguna
gracias a la prerrogativa que tiene y que solo pueden hacer uso ellos.
¿Se imaginan qué pasaría si esta prerrogativa (coeficiente
de caja) lo pudiesen usar los gobiernos? El Estado se podría financiar (casi en
su totalidad) sin necesidad de recurrir coercitivamente a extraer dinero de los
ciudadanos en forma de impuestos y en sus múltiples variantes. Se seguirían
cobrando impuestos a los ciudadanos pero éstos serían mucho menores ya que
ahora no harían falta tantos recursos para que el Estado se financie.
Con el dinero de los contribuyentes, una parte se usaría
para ‘’gasto público’’ (cómo en forma de reserva legal o coeficiente de caja;
en las ‘’cajas fuertes’’ del estado como en un banco) y la otra se invertiría y
se prestaría a otras entidades. Con lo cual, una vez obtenida la rentabilidad
de las inversiones, se podría devolver el dinero a los contribuyentes y además
financiar todo el gasto público.
Como ya nos tienen amaestrados a mover la colita a cambio de unos papeles, seguimos trabajando " gratis" puesto que nos pagan con nada . Cuando nos pagan no desaparece ni un duro de sus arcas
ResponderEliminarY en cuestionesdelavidahoy.com podrás ver porque?
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